Lucía González Dapía, joven de Verín que ha peregrinado a Lourdes como hospitalara, nos deja su testimonio:
Esta ha sido una de las pocas experiencias que realmente marcan y de esas que nunca se olvidan.
Nada más llegar me llamó la atención la ilusión y el empeño con el que todos los hospitalarios veteranos nos explicaban todo lo que teníamos que hacer, lo mucho que nos cuidaron y velaron por nosotros y las ganas y el cariño que ponían al hacer cada tarea.
Pero lo que realmente me impresionó fue la actitud de los enfermos, como, a pesar de lo que les pasaba, continuaban llenos de vitalidad, llenos de energía, llenos de fe. Admiro su fuerza de voluntad, su confianza, son todos increibles!! Aun no me puedo creer que me hayan dado las gracias ellos.. gracias a vosotros! Porque me habéis hecho cambiar, ahora veo todo con otros ojos!
A pesar de todo lo que hemos trabajado he llegado a casa con las pilas cargadas y con muchísimas ganas de volver! Lourdes ha hecho en mí maravillas! Mil gracias a todos!! (En especial a los sacerdotes por su infinita paciencia)
El año que viene más!❤